jueves, 7 de abril de 2011

El coche

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El coche era tirado por caballos
un sol resplandeciente
cobijaba las dos siluetas
que sentadas iban dentro de él

Miraban al horizonte
el cabello agitado por el viento
rozaba suavemente su mejía
y el verde de los ojos de él
tenían la intensidad de la montaña

Iban enredados en sonrisas
platicando de lo que flota alrededor
su primer paseo supervisado
el comienzo de una amistad
el último día –quizás- en verse

Han pasado los años
el paseo prevalece
los caballos tiran de otros coches
la lluvia cae

el relámpago alumbra
y los truenos estremecen
pero siguen sentados en el carruaje

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2 comentarios:

Rubén Márquez dijo...

Mía la suerte para que tu curiosidad te llevara hasta mis"historias", gracias a ella, pude llegar también hasta aquí y conocer tu versos. Desde la poesía y la música que acompañan la visita a cada una de las entradas que vas dejando, un placer poder sumergirse en ellas.

Un abrazo!

Alhami dijo...

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...me encantó la evocación que haces, sobre todo que, a pesar de que han pasado tantos años, para ti mi inolvidable y muy querida amiga "el paseo prevalece" y es verdad, pues para mí prevalece todo lo bueno en hermosos recuerdos de vida...

Eres excelente mi poeta, muy bien traído está el coche en tus letras... Gracias mil, creo que si no te leo aquí, nunca hubiera imaginado que guardaras tanto sentimiento y emociones en tu corazón, y no es solo tu poder de evocación de esta ocasión sino que es tu fecunda magia poética en acción... mi bella Cassandra, eres una gaviota que nunca deja de volar...

La foto es fascinante, de verdad es cabal, tal cual ese día que salimos sin ninguna presunción más que la de compartir y cotorrear. jajaja

Un beso grande